Resumen:
Todos los datos indican una tendencia mundial hacia la concentración urbana. Las grandes ciudades pasan a ser las principales protagonistas de este nuevo mundo, pues no solo concentran la principal oferta de trabajo y servicios públicos, sino que hacia ellas también se trasladan los principales debates sobre la provisión
adecuada de estos servicios, la polución, el congestionamiento, la seguridad y el consumo de energía. En este marco nace el concepto de Ciudad Inteligente, que pretende aglutinar las nuevas tecnologías y herramientas que nos acerca el siglo XXI con las enormes urbes metropolitanas y sus desafíos. La aplicación de las
tecnologías de la información y las comunicaciones se hace imprescindible en este nuevo contexto, como una respuesta concreta a la urbanización no planificada y a la necesidad de orientar esta expansión hacia mejorar la calidad de vida de las personas.