Resumen:
Se parte de que la humanización de la salud pública debe ser entendida como un
horizonte intelectivo que permita indagar en construcciones de sentido cristalizadas en
torno a las creencias, las rutinas diarias y a las prácticas que se llevan a cabo en una
organización de la salud pública situada en la periferia. En otras palabras, determinada por
la posición subordinada en la que se inserta respecto del sistema- mundo
moderno/colonial y que responde a la colonialidad del poder. A partir de este trabajo se
intenta indagar en las posibles materialidades que puede adoptar la subordinación
periférica -incluso dentro de un contexto periférico más amplio- a la vez que indagar en
las construcciones de sentido subyacentes en torno a los cuerpos hospitalizados a través de
los discursos que circulan dentro de una organización de salud pública ubicada en una
ciudad de 7.000 habitantes en la provincia de Buenos Aires.