Resumen:
Sostiene que, además de la anatomía real, existe una anatomía psíquica que se va formando en la percepción interna del sujeto. De esta manera cada individuo tendrá, su propia teoría psíquica del objeto-cuerpo, su imagen psíquica del objeto que debe seguir una ley, una serie de leyes respecto de la estructura del yo, compuesto por un gran conjunto de imágenes psíquicas de valor afectivo para ese sujeto. El autor postula la formación del objeto "a" a fin de comprender los fenómenos psicosomáticos. Sostiene que cada una de las formaciones psíquicas del objeto, como por ejemplo el sueño, el acting-out, un síntoma psicosomático o una alucinación, constituye la creación de una realidad nueva y estrictamente local.